La responsabilidad de un kage

Ya hacia unos meses que habia asumido el puesto de mizukage, pero la sombra de la anterior kage me seguia adonde fuera la gente aun no confiaba en mi como que yo fuera capaz de hacer lo mismo que antaño ya hacia mas de diez años una mizukage mi predecesora habia hecho abandonando la villa, la hisotira me la sabia de memoria la habia escuchado durante mis servicios como shinobi de dicha villa. Ahora llevaba en mi espalda el cargo mas importante de esta villa mi mirada perdida observaba cada rincon de la misma no estaba en mi despacho sino del lado de afuera de la misma sentado sobre una saliente del lado de arriba sin interes de nada llevaba sobre mi cabeza el sombrero de mizukage. Lo tome y lo observe dejando de mirar la villa mirando el Kanji de sombra en un color azulado celeste suspire, esto en realidad era una oportunidad o una opresion, quizas una maldicion tener este puesto enfrentar todos los dias a los aldeanos y shinobis que piensan que seras lo mismo que tu antecesor. Sacudi la cabeza sonriendo esta villa me dio la oportunidad de seguir viviendo a mi y a mi madre en realidad estaba orgulloso de llevar este cargo.

Un pequeño ruido me distrajo de mis pensamientos la puerta de mi despacho se abrio, alguien queria verme pero en realidad no le preste mucha atencion volviendo a mirar el sombrero y luego la niebla que cubria la villa era un lugar hermoso pensar que escape del infierno y ahora me encontraba siendo el lider de otra villa, una sonrisa de nostalgia paso por mis labios lentamente para finalmente susurrar al aire sin darme cuenta si alguien me escuchara.

- La sombra de la villa de la niebla, suena lindo el nombre.

Mencione cerrando los ojos de forma tranquilo y bajando a mi regazo el sombrero para sentir la briza de la niebla que cubria la nacion.

Dije, abriendo los ojos por fin y mirándo hacia arriba incrédula. ~ ¿ACASO NADIE APRENDIÓ A NO CONTRATAR A PRE-PUBERS COMO JEFES DE LAS ALDEAS? ~Mencioné, en un tono bastante exasperantes mientras me agarraba la cabeza para intentar no romper todo en ese lugar, debía controlarme, se supone que ya superé esos ataques de rabia hace un par de años... ¿o no? Bueno, al parecer no... de todas formas, un minuto en ese lugar al que pensaba llevarlo y se volverá todo un hombre.