De paseo...~ Cadis//Mizore [Privado]

Una sonrisa se esboza en su rostro estaba muy feliz eso se notaba y algo mas ¿Que es lo diferente? Aparte de portar una vestimenta diferente a la anterior la cual consiste en un pantalón gris el cual no llega a sus tobillos, sobre puesta trae una mascada especial para la cintura de color rosa, en el torso una playera de manga corta del mismo color que el pantalón, sobre puesto un chaleco bi color, azul del torso y de la capucha es rosa, su banda la cual muestra que ya es un rango mayor a lo que solía está atada a su cuello. Su rostro contento está cubierto de algunos parches los cuales cubren los rasguños surgidos por el entrenamiento que tuvo hace ya un tiempo, su paso es lento y tambaleante pues su mente divaga y su mirada admiraba aquel paisaje.

El clima era algo extraño, era frió y con niebla cosa nada rara para una Kunoichi de Kirigakure pero ella esperaba que fuera un lugar con un poco de sol ya que en su aldea natal nunca o casi nunca deja hacer presencia del sol y tenía la esperanza de poder disfrutar de un día soleado, sin embargo no le importaba mucho nada en ese instante ya que tenía un jubilo que nada ni nadie le arrebataría. – Geee..~ Gennin..~ Soy Gennin por fin..~ - murmuraba en voz baja sin embargo su entonada era como si cantara, sus ojos estaba cerrados y aquella sonrisa aun no desaparecía, el paisaje era un enorme lago y la chica estaba caminando a las orillas de este mismo. – Hellgates ya no es una simple estudiante..- se dijo a si misma mientras detendría su paso y su mirada se clava en la parte posterior del lago, los ojos se le iluminaron como si viera comida ,es una chica algo impulsiva y no controla sus acciones, trabaja un poco en ello para dejar de ser tan “ella “pero al fin y al cabo es una niña aun y lo poco que ha trabajado fácilmente se va al carajo cuando una idea loca llega a su pequeña y trastornada cabeza, suspirando levemente. “Como que entran ganas de irse a ahogar un rato” Piensa mientras ve el lago y mira a sus costados tan solo con la mirada. “Nada por aquí...” Mira hacia la derecha “Nada por allá” mira hacia la izquierda. “Bueno que mas da” fue su último pensamiento antes de impulsarse un poco lanzando su cuerpo hacia el lago dejando que este se sumergiera y se comenzara a hundir en el interior de este pues nado un poco para llegar a una zona poco profunda, se queda sumergida, el agua estaba helada y se estaba arrepintiendo ya de a verse lanzado pero ya sería algo tonto salirse sin hacer lo que quería, abrió los ojos para ver el interior del lago pero la vista era borrosa, al no a ver mucha iluminación tan solo su vista se nublaba por el agua, de su nariz salían pequeñas burbujas y sus mejillas estaba llenas de aire pues trataba de contener la respiración.

Desde muy temprano aquel ninja había salido de su aldea a disfrutar de la calma, las cosas se ponían mal y en momentos como esos le gustaba salir del desorden y buscar un poco de tranquilidad para su mente y sus pensamientos, de esta forma no andaría estresado por todos lados y su sonrisa permanecería en su rostro, así no dejaría de ser el mismo, lo más importante para el, era preservar u identidad y su buen carácter ante todo, pase lo que pase no se vería afectado por lo demás. El chico portaba una vestimenta casual, clásica en el. Su vestimenta consistía en un chaleco negro, este estaba abierto, debajo de dicho chaleco llevaba una camisa blanca, esta era de mangas largas, a diferencia de otras ocasiones, ahora llevaba unos jeans negros acompañado de unos zapatos del mismo color, todo porque tenía que caminar mucho para llegar a un lugar calmo.

Tras varios minutos, incluso horas de caminar, se vio frente al lugar perfecto para estar, se trataba de un inmenso lago que estaba rodeado por una naturaleza bastante bella, la vista que tenía frente a sus ojos era tan hermosa que el chico inclinó su cabeza, cerró los ojos, abrió sus brazos e inhalo el aire puro del lugar para luego sonreír feliz por verse en un lugar como ese. Luego de hacer eso fue hacia la orilla del lago, se vio frente a un árbol de manzanas, este estaba cerca de la orilla, a dos pasos de la misma de hecho, bajó una d las manzanas, se sentó sobre el pasto que adornaba el suelo, apoyó su espalda en el árbol y comenzó a comer relajado. No le bastó con una manzana, por lo que bajó cerca de 20 y las dejó todas amontonadas junto a el, la sombra del árbol le brindaba la perfecta comodidad, se encontraba en paz absoluta. El sonido del agua que se agitaba le hizo dejar esa tranquilidad, por lo que el pelinegro giró su vista hacia el lugar de donde venía el sonido, alcanzó a ver un pie, aparentemente no se encontraba solo, pero el hecho de que el resto del cuerpo que acompañaría aquel pie no saliera le preocupó, solo se veían las burbujas salir a la superficie y desaparecer. El shinobi se levantó rápidamente de donde se encontraba y saltó al agua, su vista no era tan mala, pues alcanzaba a ver bajo el agua, ahí notó la silueta de alguien, sin pensarla dos veces tomo a esa persona de la cintura y la llevó a la orilla del lago -Hey ¿Se encuentra bien?- El chico estaba preocupado, al sacarla notó que se trataba de una chica, su cabello y su físico la delataban, pero no se preocupó mucho en ver más allá de eso, estaba más preocupado porque no sabía mucho de primeros auxilios, por lo que el pelinegro nada más picaba las mejías de la chica preguntando sin cesar -¿Está bien? ¿Puede respirar? ¿Le duele algo?- A pesar de ser una perfecta des conocida se traba de una vida humana, por lo que la preocupación era muy notoria en el rostro del pelinegro.

Encontrándose en el fondo su vista se estaba acostumbrando al interior del lago ya que cada vez miraba menos borroso, eso le puso alegre tanto que al dejar escapar una pequeña risa el oxigeno escapo con ella, llevando ambas manos a su cuello pues no podía respirar, se estaba ahogando al dejar salir el poco aire que había resguardado en su interior, rápidamente y por instinto empezó a moverse hacia la superficie pero cuando estaba por llegar a esta algo se lanzo al agua y la golpeo un poco haciendo que se sumergiera de nuevo, ahora si ya no aguanto y tan solo de su boca salían las últimas bocanadas de aire en forma de burbuja, sus ojos se cerraron y quedo flotando dentro del agua sin embargo estaba aun algo consiente, sintió como alguien la sujeto y después de eso tan solo vio la superficie y salir hacia esta, apenas salió comenzó a toser mucho escupiendo el agua que se había tragado, bastante aturdida sin saber que pasaba tan solo escucho que le preguntaban si estaba bien que si respiraba y ante ello solo movió una mano colocando la en el rostro de aquella persona que la salvo, su palma estaba abierta y en medio del rostro de aquel individuo, moviendo un poco su cabeza para desaturdirse mira de reojo a aquella persona dándose cuenta de que era un joven con lo poco que veía pues su mano cubría el rostro del chico, tan solo parpadea un par de veces y con su otra mano talla sus ojos y asiente un poco. – Aun me muevo, creo que esa es buena señal..- hizo una pequeña pausa para toser un poco mas – Suerte que no es agua salada, esa sabe peor.. por cierto ¿Usted quién es?- dejando de tallar sus ojos fija su mirada en los orbes rojizos del chico que prácticamente la salvo.

Fue inmeso el alivio que sintió tras ver que aquella chica se encontraba bien, y su comentario con respecto al agua salada era certero y gracioso a la vez, lo que le hizo sonreír, luego de esa sonrisa dejó salir un suspiro de alivio, bajando la mirada. El sentir la fría palma de la mano ajena sobre su rostro le hizo sorprenderse un poco, no por el frío, porque estaba acostumbrado al frío, sino porque aún lograba sentir el tacto ajeno sobre su rostro. No era algo muy común el hecho de que pusieran la mano en tu rostro, por lo que el pelinegro abrió un poco de más sus ojos, el escuchar las palabras de la chica le hizo volver a relajarse, una vez más un suspiro salía de su boca, de su rostro lo único que quedaba sin cubrir eran sus ojos, por lo que podía apreciar mejor el rostro ajeno.

El pelinegro se quedó quieto, se encontraba con sus rodillas haciendo contacto con el el suelo, sus manos estaban libres al aire y permanecían inmóviles, su cabello únicamente se movía con la suave brisa del viento, que por cierto, era lo único que se encontraba en movimiento de el, ya que u camisa se encontraba completamente pegada a su cuerpo, dejando ver los definidos que se encontraban sus músculos, de no ser por el chaleco negro, se vería prácticamente sin camisa -Es un alivio que se encuentre bien- El chico sonrió aliviado, aunque eso no se notaba porque tenía la mano ajena sobre su rostro aún -Mi nombre es Cais Leicester- Sus anos se apegaron su propio torso mirando a la chica -¿Cuál es su nombre chica que casi se ahoga?- El chico permanecía completamente relajado, pero a pesar de eso, estaba muy inmovil, mientras que el viento se iba encargando de secar su vestimenta.

Parpadeando un poco escucho el nombre del joven y rápidamente retira su mano del rostro del chico de igual forma se aleja del un poco. – Uu.. Perdone por eso – dice sujetando su mano con su otra mano. – ¿Chica que se ahoga?- Sonríe levemente agachando la mirada suspirando – Bueno en si no es así pues estaba bien hasta que me reí.. y estaba bien incluso después de eso pues casi salía pero algo me regreso al agua y..- hace un pausa suspirando pesadamente negando – Ahí ya no estuve bien- dijo en un tono molesto y cerrando los ojos llenando de aire su boca haciendo que sus mejillas se miraran gordas pero era por el aire que tenían en su interior. “Vez Mizore tú y tus bakadas” Piensa mientras sigue negando una y otra vez, de pronto recordó que el chico le pregunto su nombre y abrió sus ojos dejando salir el aire que contenía. – Mizore, mucho gusto – Aun cuando se alejo de él y lo sabe estira su mano con la palma abierta con el fin de saludarle. – Soy de Gennin de kirigakure ¿Y usted?- permanece con la mano extendida esperando a que este corresponda el saludo.

Finalmente la mano de la chica es retirada del rostro del pelinegro, aquel respiraba a la perfección ahora, de hecho, hasta inhalo cierta cantidad de aire y luego la expulsó denotando extrema tranquilidad en su rostro, acto seguido una sonrisa adornó el rostro del joven mientras que aquellos rojos ojos se posaban en las cristalinas aguas del lago -Tranquila, no pasa nada- Luego de dejar su mente volar en los reflejos del agua del lago, giró su cabeza para poder ver el rostro de la chica, no sabía si solo era el o o qué cosa, pero la veía ya más alejada, el simplemente no prestó tanta atención a ese pequeño detalle, después de todo, no es como si iba a obligarla a que estuviese cerca de el, sería un poco acosador de su parte y raro.

El pelinegro escuchó la pequeña narración de la chica con respecto a los sucesos previos a su encuentro, y tras terminar de escucharla, el pelinegro colocaba su mano en su rostro pensando "Empeoré las cosas, bien hecho Cadis, otro punto para ti eh" El chico sonrió y bajó la mirada levemente, luego la volvió a levantar con aquella amabilidad que solo el podía denotar -Bueno, los accidentes pasan, lo bueno es que estuve ahí para ayudarla- Dicho eso, el pelinegro se paso la mano por su remojada cabello, este goteaba sobre sus ropas y parecía como si no fuese a perder su humedad muy pronto -El gusto es mío Mizore, gennin de Kirigakure. Yo soy un jounin de Kumogakure- El chico llevaba su mano a su nuca sobando esta con una sonrisa nerviosa en su rostro -Se que no se nota mucho pero es que mi protector está perdido y si se lo digo a mi kage seguro me cuelga en la pared disecado- El chico fijaba aquellos rojos ojos en la ajena -¿Es un bonito lugar para estar verdad?- El chico volvía su mirada hacia el lago sonriendo -Se que es un poco competitivo, y nos acabamos de conocer, pero esa agua se sintió maravillosa ¿Qué dice sobre un competencia pequeña de natación?- El chico volvió su mirada, una vez más hacia la femina con una sonrisa amable en el, en espera de que la respuesta a aquella pregunta fuese positiva.

Mientras recordabas los hechos tan solo miro de reojo al joven este parecía actuar algo extraño en ocasiones pero pues que iba a saber ella, casi no había tratado con personas en los últimos años, sin más suspiro levemente escuchando de donde era el ”Curiosesco.. No tenía el gusto de conocer a un ninja de kumogakure” Pensaba y tan solo a la par esboza una leve sonrisa- Un gusto shinobi de Kumogakure, vaya un jounnin, es difícil llegar a ser ese rango?- Bastante interesada pues su expresión facial cambio a penas reacciona ante el rango del joven, deja al distancia acercándose a donde él, arrastra un poco su cuerpo sin ponerse de pie para volver a estar algo cerca. – ¿Es difícil? ¿Qué se siente ser jounnin?- Los ojos le brillan tal cual al inicio que vio el lago, después escucha la propuesta y rápidamente se pone de pie y corre hacia el lago. – Vamos!!!- grita mientras corre y tan solo se detiene a la orilla del lago observando este mismo. - ¿De donde a donde sera la carrera?- Pregunta mientras comienza a calentar pues mueve su brazo derecho de manera circular y su pie izquierdo de igual forma.

El pelinegro nota de pronto una fascinación en el rostro de la fémina, lo que le hace extrañarse levemente del acto ajeno y sonreír por el entuciamo de la misma, de un momento a otro y sin dar oportunidad de contestar la chica se pone de pie y empieza a correr a la orilla, mientras que el pelinegro a duras penas mueve su cabeza para seguir con la mirada a la menor, al ver que esta se detiene en la orilla haciendo una nueva pregunta a su persona, por lo que el chico, con suma tranquilidad, se pone de pie, camina tranquilamente hacia la chica viéndola -Si me gana le contestaré las preguntas anteriores, la carrera será hasta el otro extremo del lago. Y ganará lo que le dij antes y lo que se me ocurra después- El chico comenzaba a estirarse, primeramente sus manos, tomándose el codo con un estirando su brazos, y lo mismo con el otro brazo.

Una vez que estiró sus manos y previamente a eso sus pies, dio un par de saltos y miró a la chica sonriendo -Muy bien, a la cuenta de 3- El chico se pone en posición con su vista hacia el lago -¡¡3!!- Sin molestarse en contar los otros números, se lanzó al agua y comenzó a nadar de forma rápida en dirección a la otra orilla -No se quede atrás Mizore- Dijo en un tono un poco gracioso continuando con su acto previo.